En mi nuevo artículo para la revista online Malicieux Magazine, hablamos de los distintos mitos que rodean al hecho de tener pareja. ¿Tenemos unas nociones demasiado tradicionales sobre el amor y las relaciones sentimentales? ¿Caemos en los prejuicios de siempre? Échale un ojo al artículo y compruébalo tú mismo/a.
Recientemente ha surgido en mi círculo cercano el debate sobre lo
que está y no está permitido en una relación de pareja. Como si hubiera
una especie de código que seguir porque, de no hacerlo, eso significa que no se
quiere a la otra persona. Pero si hay una cosa que está clara, es que todo está
reducido a una cosa: educación.
Desde que nacemos se nos educa en la idea de que somos el fruto
del amor de nuestros padres, monógamos y, por supuesto, fieles. Se nos insta a
buscar a la “pareja ideal”, con la que todo será perfecto y tendremos hijos
bellísimos. De alguna forma aprendemos que hay varios tipos de personas: “solo
amigos”, “líos de una noche”, “amigxs con derecho” y “potenciales parejas”. Que
dependiendo de en qué grupo esté el otro, merece más o menos nuestro respeto.
Que si queremos que una relación funcione, no se puede tener sexo en la primera
noche. Sobre todo si eres mujer. Sí, los estereotipos nos siguen bombardeando,
hagamos lo que hagamos. Además, aprendemos que no se pueden hacer las mismas
cosas en la cama si hay sentimientos, que si no los hay. (“¿Cómo le voy a hacer
a mi novia lo que veo en el porno?”). Que si amor, no cabe en la cabeza de
nadie que puedan hacerse tríos o intercambios de pareja. Que debemos contarle
todo. Que discutir es signo de problema…pero el no hacerlo, también lo es. Si
hay un problema con el otro, se sigue acudiendo antes a los amigos que a ese
otro, quien a menudo vive ajeno a tal circunstancia.
Se crea en nosotros la idea de
que los celos son buenos, porque de no tenerlos significa que el otro no te
importa. Que nuestra pareja es solo nuestra, y nadie la puede tocar. Que los ex
son malas personas que van a querer destruir nuestra nueva relación. Que la
infidelidad es un pecado que acaba con la confianza y, por tanto, con la
relación. Salvo que el otro no se entere, ahí ya hay más diversidad de
opiniones… Pincha en este enlace para leer el artículo completo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario